El tratamiento de agua potable garantiza la calidad del recurso que llega a tu hogar pasa por un riguroso proceso. Desde la captación en su fuente hasta la distribución en los hogares limeños, la empresa Sedapal se asegura de que el agua que consume la población cumpla con los más altos estándares de calidad.
En este artículo, vamos a explorar en detalle el proceso de tratamiento de agua potable en la Planta de Atarjea, el principal centro de producción de agua potable para la ciudad de Lima.
Proceso de potabilización del agua
1. Captación del agua
El proceso hídrico comienza en el río Rímac, donde se capta el agua con una capacidad de 5 m³ por segundo. En esta etapa, las rejas filtran los desechos grandes como cañas y troncos, reafirmando que el agua fluya sin obstrucciones hacia los desarenadores, donde se inicia el pretratamiento.
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2. Separación de partículas en los desarenadores
A pesar de que el agua puede parecer clara, siempre contiene pequeñas partículas de arena. En los desarenadores, esta pasa por un proceso de separación de partículas finas, preparándola para la siguiente etapa del tratamiento.
La Atarjea tiene 24 pozas desarenadoras, organizadas en dos grupos de 12 unidades. Esto garantiza que el agua se distribuya de forma uniforme y el proceso sea eficiente.
3. Precloración
El proceso de limpieza del agua también incluye la precloración. Aquí, se agrega cloro como desinfectante para reducir la contaminación bacteriana en un 99.9% antes de que el agua se dirija a los embalses reguladores. Este procedimiento garantiza un control efectivo de microorganismos y favorece que el agua continúe su tratamiento en condiciones óptimas.
4. Embalses reguladores
Los embalses reguladores permiten almacenar el agua durante 15 horas, sin que se capte más del río. Durante este proceso, se aplican sustancias químicas que ayudan a aglomerar las partículas en suspensión, lo que facilita su sedimentación en las siguientes etapas del tratamiento. Este proceso tarda unas 10 horas, por lo que mejora la claridad y transparencia del agua.
5. Dosificación de coagulantes y floculación
En esta fase, el agua se dirige a los decantadores, donde se aplica cloruro férrico, un coagulante químico. Este coagulante provoca que las partículas finas y las impurezas se junten en grumos pesados, que luego se sedimentan, dejando el agua más clara.
6. Decantación
Después de la floculación, el agua se dirige a los decantadores, donde se lleva a cabo el proceso de decantación. En esta etapa de la potabilización del agua, los flóculos formados durante la floculación, que son partículas más grandes y pesadas, se depositan en el fondo del decantador debido a la gravedad.
Este proceso permite que las impurezas y los sedimentos voluminosos se separen eficazmente del agua, mejorando su claridad y reduciendo su turbidez.
7. Filtración
Tras la decantación, el agua pasa a las pozas de filtración, donde se retienen las partículas más finas que pudieron haber pasado a los pasos anteriores. El proceso de clarificación se completa con los filtros tipo T, que garantizan que el agua esté limpia antes de distribuirse a la población.
8. Planta de recirculación y lavado de filtros
El lavado de los filtros es una parte esencial del proceso para mantener la calidad del agua. En la planta de recirculación, se recupera y reutiliza el agua para limpiar los filtros, optimizando así el uso de recursos.
9. Cloración final
Antes de distribuirse a los hogares, se aplica cloro una vez más como parte del tratamiento de agua para consumo humano, para garantizar que cualquier microorganismo restante sea eliminado, favoreciendo que el agua potable sea segura para el consumo.
10. Reservorios de almacenamiento
Finalmente, se almacena el agua en reservorios, donde su disponibilidad se regula en función de la demanda. Estos reservorios aseguran un suministro continuo de agua potable, incluso en períodos de bajo consumo.
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La importancia de los biólogos en el proceso de tratamiento del agua potable
El proceso de purificación de agua en Sedapal no sería posible sin la colaboración de biólogos especializados. Estos profesionales realizan un monitoreo constante de los microorganismos presentes en el agua, como fitoplancton y zooplancton, además de analizar metales pesados como hierro, plomo y arsénico.
Este trabajo es fundamental para garantizar que el agua que llega a las viviendas limeñas sea completamente segura.
Desafíos del tratamiento de agua en Lima
Uno de los principales desafíos a los que se enfrenta Sedapal es la contaminación que causa la actividad industrial y el cambio climático. En particular, el río Rímac ha sufrido una creciente contaminación en los últimos años, sobre todo en la cuenca media.
Esto ha aumentado la presencia de contaminantes como metales pesados provenientes de la quebrada de Huaycoloro, obligando a Sedapal a intensificar sus esfuerzos para garantizar que el agua cumpla con los estándares de calidad.
Por este motivo, Sedapal continúa implementando tecnologías de vanguardia para mejorar la eficiencia y calidad del tratamiento de agua. Desde filtros avanzados hasta sistemas de ozonificación y membranas de ultrafiltración, la empresa busca modernizar sus plantas para hacer frente a los crecientes desafíos de la ciudad de Lima.
Ahora que ya conoces todo sobre el tratamiento de agua potable, es importante reflexionar sobre el esfuerzo y los recursos invertidos en cada fase del proceso. Desde la captación en el río Rímac hasta el almacenamiento en los reservorios, cada etapa tiene un propósito claro: garantizar que el agua que consumimos sea de la más alta calidad posible.
Recuerda que es un recurso vital. No la desperdicies y cuida de ella para las futuras generaciones.
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